Resumen de las repreguntas
Este documento representa una interpretación de lo ocurrido, y puede tener cierto carácter subjetivo. Para una referencia absoluta de lo ocurrido, revisar la transcripción literal.

Cisneros inicia por cuestionar la respuesta dada por Pacheco, citando que Pacheco habló de todo pero nunca contestó la pregunta. No dijo ni cuál era el problema ni cómo lo iba a resolver. Pacheco responde que el problema es haber perdido la huella de los antepasados y los valores que nos legaron. Indica que la manera de resolver el problema es recuperando esos valores, esa senda "que marcaron los hombres del 56".

Santos cuestiona lo dicho por Solís en una entrevista hace cuatro días, en donde indicó que su campaña no estaba lista, pero que todo lo iba a sacar a punta de "mística". Surge así la "mística de Ottón": Solís responde que todo lo que han hecho hasta el momento ha sido a punta de mística, la cual está en el pueblo costarricense. Indica que la mística ha logrado vencer todo, y que sin duda vencerá para sacar adelante las elecciones y el país.

Cisneros pasa luego a cuestionar a Guevara, y de paso casi se ahoga haciendo la pregunta. Cuestiona el concepto de "desconcentrar" el poder planteado por Guevara, preguntando cómo planea hacerlo. Guevara responde que la manera de hacerlo es destruyendo la concentración de poder en los políticos. Cisneros interrumpe a medio discurso para indicar que ya la receta es conocida, pero que quieren saber en qué consiste. Guevara explica que consiste en crear un gobierno con verdadero liderazgo, en reformar leyes y reglamentos, en eliminar los monopolios estatales, y dar al costarricense la posibilidad de escoger la moneda en que realiza sus transacciones. Según Guevara, en el momento en que se logre la libre competencia en Costa Rica, los costarricenses vivirán mucho mejor.

Finalmente Santos cuestiona a Araya, diciendo que Liberación Nacional no ha logrado cambiar nada en los últimos 20 años. Pregunta qué hace el planteamiento de Araya diferente. Araya refuta la idea de que el PLN no haya logrado nada, citando como Luis Alberto Monge sacó a Costa Rica de la crisis en 1982, como Oscar Arias llevó al país a las primeras posiciones en latinoamérica en IDH, y como Figueres Olsen entregó un país con 8% de crecimiento anual, 2% de déficit fiscal y 4% de desempleo. Admite, sin embargo, que la última década no ha sido fácil para nadie, ni para el PUSC ni para el PLN.